APOCALIPSIS
La crisis, eso que estamos dejando atrás, dicen algunos. Algo que se vía venir, dicen otros. Algo que negó pese a la evidencia el gobierno de Zapatero. Zapatero ya es puta mitología, como el coño de la Bernarda, el Hombre del Saco o María Castaña. De vez en cuando aún nos asustan los políticos actuales citándolo: “Es que Zapatero…” Cuando no tienen respuesta para algo ahí está el estribillo: “Esto es la herencia de Zapatero”. No seré yo quien alce la voz para defender al anterior presidente del gobierno: a fin de cuentas los expresidentes del gobierno de España se defienden escribiendo libros, impartiendo conferencias y figurando en consejos de administración. La crisis, decía al principio, en las circunstancias actuales y con el gobierno que nos masacra miserablemente desde 2011, me ha hecho descubrir pasajes propios del Apocalipsis: es decir, este gobierno no toma medidas anticrisis sino medidas anticristo. Es la encarnación del mal. Sí, puede aparentar ser un gobierno de derechas, algunos de sus miembros pertenecen al Opus Dei o a Los Legionarios de Cristo o a la Santísima Transfiguración de la Divinidad Deletérea; pueden asistir a procesiones con mantilla y comulgar en actos religiosos pero todas sus actividades prácticas a la hora de encarar la perniciosa influencia de Zapatero cuyas secuelas estamos padeciendo, por decirlo según sus propias palabras, no son medidas anticrisis sino medidas anticristo. Llevan dos años estrangulándonos, auguran los brotes verdes, la mejoría de la macroeconomía pero yo sigo percibiendo la realidad diaria: los locales vacíos, la gente en el paro, las subvenciones y ayudas descabezadas, las pagas miserables, los trabajos escandalosamente precarios en medio de los privilegios que siguen manteniendo quienes nos gobiernan. Estamos asomando la cabeza, dicen, pero a la vez programan nuevos recortes: confunden la tala con la poda. Son la encarnación el Anticristo en un panorama vergonzoso de corrupción del que suelen salir ilesos. “El apocalipsis ya está aquí”, decía un personaje de una novela titulada Nunca. En el capítulo 18 del Apocalipsis se dice: “…Y los mercaderes de la tierra se han enriquecido de la potencia de sus deleites.” Y agrega: “Porque en una hora han sido desoladas tantas riquezas.” En fin, que se están cumpliendo la profecías de San Juan y bajo forma humana, el Anticristo ha tomado posesión del poder, así que ya nos podemos ir preparando para lo que venga que no puede ser nada bueno, visto lo visto. El que sepa rezar, que rece. Y el que no, que recurra al vino, a la lectura, al deporte o a la blasfemia, que consuela un huevo.